Entrevistas electorales: Eusko Alkartasuna

Por JAVIER DOMÍNGUEZ

Periodista

Nacido en Mungia en 1970 y abogado de profesión, Unai Ziarreta se incorporó a la militancia política activa en 1998 impulsado, según él mismo ha confesado más de una vez, por la enorme ilusión que el Acuerdo de Lizarra-Garazi generó en toda la sociedad vasca. En 2003 fue nombrado secretario general de EA, cargo que compatibilizó con una concejalía en el Ayuntamiento de su pueblo, Mungia, hasta que en 2007 fue elegido presidente de EA en sustitución de Begoña Errazti.
Apasionado tanto en la vida política como en la personal, es un enamorado auténtico de su familia. Vive también con pasión su hobbies, como la música –se relaja tocando la guitarra, y nos cuentan que es bastante rockero– y el motor –participa siempre que puede en rallys clásicos–. Gaztelugatxe es su rincón favorito de Euskal Herria; y, si tiene que elegir un color, se queda con el rojo. Otro símbolo de apasionamiento.

- Acabo de llegar a Euskadi desde un lugar muy lejano y no conozco absolutamente nada. ¿Cómo me explica, en un minuto, cómo es el País Vasco, en lo bueno y en lo malo?
- Permítame que no hable de Euskadi, sino de Euskal Herria. Le diría que Euskal Herria es una nación de siete herrialdes dividida administrativamente entre los estados español y francés. Es una nación que aún sufre hoy las consecuencias dramáticas de un conflicto político que ya dura demasiado y que urge resolver. Es una nación en disposición de dar un salto cualitativo hacia un nuevo marco jurídico-político en paz basado en el respeto a la voluntad de la sociedad vasca. Para eso y por eso trabajo desde EA.

- Es momento de que haga, brevemente, un análisis de la situación actual de Euskadi en varios aspectos. Y empezamos, cosas de la actualidad, por la economía.
- En Euskadi hemos hecho los deberes, hemos gestionado bien y gracias a eso hoy estamos capacitados para afrontar la crisis económica con éxito y salir de ella fortalecidos.
- ¿Qué diría sobre... la industria?
- El peso del sector industrial en la economía vasca es nuestro mejor aval para hacer frente a la crisis. Por eso apostamos por políticas públicas que fortalezcan la industria, con el doble de ayudas a la creación de nuevas empresas, con medidas que faciliten la financiación, con una apuesta clara y firme por la innovación, la única manera de garantizar la competitividad de la industria vasca en una economía globalizada.
- Toca el turno de analizar el tema de la vivienda.
- En EA defendemos el derecho a la vivienda como derecho público subjetivo, es decir, un derecho que debe garantizar la Administración y que, si no es así, pueda ser reclamado en los tribunales. Reclamamos un gran pacto social e interinstitucional entre la Administración y los agentes implicados en el sector para cuantificar las necesidades y consensuar medidas, haciendo especial hincapié en la promoción de viviendas de alquiler social.
- Siguiente asunto: infraestructuras.
- El desarrollo económico de un país de ninguna manera puede hipotecar el futuro de las generaciones venideras. Creemos en un desarrollo sostenible, capaz de compatibilizar el crecimiento económico y la protección del medio ambiente y los recursos naturales.
- Háblenos ahora de Política Institucional.
- Destacaría que ya es hora de reformar la Ley de Territorios Históricos (LTH) para gobernar este país como lo que es: una nación, no tres. Una reforma que vertebre el país; que coordine los distintos niveles institucionales; que garantice eficacia en la gestión; que evite duplicidades y gastos innecesarios, como el de crear dos empresas públicas, una en Bizkaia y otra en Gipuzkoa, para gestionar 100 kilómetros de autopista; que garantice la igualdad entre los ciudadanos y evite que en unos lugares tengan derecho a determinados servicios sociales y en otros no.
- Y, ¿qué diría de Política Lingüística?
- El Gobierno vasco debe garantizar los derechos lingüísticos de todos los ciudadanos, su derecho a ser atendidos por la Administración en euskera o castellano. Los euskaldunes aún vemos hoy vulnerado ese derecho y es obligación del Gobierno corregir definitivamente esa injusticia mediante la correcta valoración del euskera en las ofertas públicas de empleo. Igual de prioritario debe ser también la superación del sistema de modelos lingüísticos en la enseñanza para garantizar que al terminar la ESO todos los alumnos dominen las dos lenguas oficiales y tengan conocimientos amplios de inglés o francés.
- Siguiente ámbito: la Cultura.
- Creo que un país moderno es el que atiende su patrimonio cultural y está, en este mundo globalizado, en relación constante con otras culturas. Un modelo cultural abierto que sea reflejo de nuestra identidad y que no esté supeditado ni enfocado casi en exclusiva a las grandes infraestructuras tipo Guggenheim.
- Educación.
La Educación es un elemento clave para construir una sociedad más equilibrada, justa y cohesionada y como servicio público que es, los pilares del sistema educativo deben ser la igualdad, la calidad, el plurilingüismo y la autonomía de los centros de enseñanza.
- ¿Cómo ve a la sociedad vasca en materia de convivencia?
- A pesar del permanente fragor del debate político, la sociedad vasca es tremendamente inteligente y en Euskadi no padecemos graves problemas de convivencia social en el día a día. Eso no significa que no haya retos ni cuestiones que corregir. Me quedo con una fundamental: es vital avanzar en la igualdad real de oportunidades entre hombres y mujeres, es vital trabajar por el empoderamiento de las mujeres. Es ahí, en el origen, en esa situación de partida de desigualdad, donde nace la violencia machista contra las mujeres, una lacra a erradicar por completo.
- Para terminar con esta batería de cuestiones, comentemos algo sobre Inmigración.
- Frente a la asimilación, apostamos por la integración, por que los inmigrantes mantengan su propia identidad. Apostamos por una convivencia basada en el respeto y el reconocimiento del otro. Defendemos un concepto de ciudadanía inclusiva, que permita la plena participación de los inmigrantes en la comunidad política y que garantice el respeto absoluto de sus derechos humanos sea cual sea su situación legal.

- Aunque ya ha dejado caer bastantes cosas, tiene la oportunidad ahora de destacar esas tres ideas de su programa electoral que considere básicas e indiscutibles.
Primera idea. Apostamos por la articulación de un amplio movimiento político que agrupe a todas las fuerzas soberanistas como única vía para la solución del primer problema de la sociedad vasca: la falta de paz y normalización.
La segunda: contra la crisis, más gasto social, más Estado de Bienestar. No puede ser que los efectos de la crisis los sufran más quienes menos tienen. El Gobierno vasco tiene instrumentos suficientes para garantizar con políticas progresistas una calidad de vida digna a toda la ciudadanía.
Por último, una cuestión de fondo. La respuesta a la pregunta de "por qué queremos la soberanía". Queremos la soberanía para vivir mejor. La crisis nos está enseñando que Euskal Herria necesita disponer de todos los instrumentos para hacer frente a los retos del futuro. No podemos depender ni esperar a que algún día en Madrid suene la flauta y Solbes o Zapatero puedan acertar con sus recetas.

- Pasemos por un momento al plano personal. ¿Cuál considera que es su mayor virtud como candidato?

- Coherencia y claridad en los planteamientos.

- ¿Y su mayor defecto?

- Pues lo mismo: la coherencia y la claridad. Porque pueden llegar a ser perjudiciales en un mundo político en el que a veces hay demasiada falsedad.

- ¿Qué número de parlamentarios espera conseguir el 1 de marzo?
- Los suficientes y necesarios para condicionar la política vasca y conducir al Gobierno y al Parlamento por la senda del soberanismo.

- Hablemos del día 2. ¿Qué coaliciones le gustaría que se dieran y cuáles cree que se darán?
- Me gustaría un Gobierno de corte soberanista, con un programa y unos compromisos firmes y claros en ese sentido. Me temo, sin embargo, que el PNV y el PSE pactarán para volver al pasado, al autonomismo y al sano regionalismo español. Eso es lo que queremos impedir desde EA, porque sólo una EA fuerte será capaz de evitar que el PNV eche por la borda los avances de estos 10 años en clave soberanista.

- Como a todos los candidatos, le ofrecemos el final de la entrevista para que lance a nuestros lectores el mensaje que le apetezca.
- El día 1 de marzo la sociedad vasca tiene que elegir: o volver al pasado, al autonomismo, a los pactos PNV-PSE o mirar al futuro en clave soberanista para abordar de una vez por todas la resolución definitiva del conflicto político.
En EA tenemos claro que hay que apostar por el segundo camino, por la articulación de un polo soberanista democrático que llegue a convertirse en la primera fuerza política del país y lleve a la sociedad vasca a un nuevo marco donde todos los proyectos políticos sean posibles por vías políticas.
Apostamos por el soberanismo para dar la mejor respuesta a la crisis, para disponer de nuestros propios instrumentos, para no tener que esperar a que en Madrid acierten alguna vez, para aplicar políticas progresistas claras y concretas que fortalezcan nuestro tejido industrial y garanticen la calidad de los servicios y las prestaciones sociales también en época de crisis.
En definitiva, reivindicamos la soberanía, el autogobierno pleno, porque la historia nos demuestra que a mayor autogobierno, mayor bienestar.